Rafael Espinosa | Día Uno | Es posible que los mil 600 bimestrales que se entregarán de manera directa a los padres o madres, sean usados para otros fines, particularmente, en las familias de escasos recursos que viven en los cinturones de mayor pobreza en la capital chiapaneca.
Los niños no tendrán la misma enseñanza en casa que en las estancias infantiles; es decir, control de esfínter, aprendizaje de las vocales, colores, trazos recortes, inglés, actividades cognoscitivas, motrices, estimulación temprana, así como juegos lúdicos y didácticos.
Generalmente, papá y mamá están ocupados en los quehaceres del hogar o el trabajo, de tal manera que los dejarán, como suele suceder, frente al televisor o el teléfono celular, sin que estén al cuidado personalizado de niñeras, como en las estancias.
En estos espacios les dan desayuno, colación y comida, en un horario promedio de ocho de la mañana a cuatro de la tarde, mientras papá o mamá trabaja.
Anteriormente, la estancia recibía un subsidio mensual de 950 pesos. Con este nuevo programa se quedarán sin este recurso. Ahora, el Gobierno Federal entregará mil 600 pesos bimestrales directo a los padres o madres de familia.
Ha ocasionado desempleo. Las estancias infantiles han comenzado a despedir a niñeras por falta de recursos, pues tienen que pagar agua, luz, teléfono, impuestos, renta en la mayoría de casos, así como el mantenimiento de cámaras de seguridad, extintores, entre otros gastos.
Si a esto le sumamos que el Gobierno Federal apoyará únicamente a niños menores de tres años, cuando antes era de cuatro años para abajo, el Gobierno Federal ahorrará el presupuesto de estos últimos.
Con el subsidio a estancias infantiles, había casos en los que no se les cobraba, pues dependía de un estudio socioeconómico previo.
Ante la falta del subsidio, las estancias infantiles aumentarán su precio para poder subsistir, de lo contrario están condenadas a desaparecer. La opción para las familias es ingresar a los niños en escuelas particulares cuya cuota está por encima de lo que pretende dar el Gobierno Federal. O en escuela públicas ya de por sí saturadas.
El Gobierno Federal propuso el cuidado de los niños a los abuelitos, sin embargo, no todos están en posibilidades de cuidarlos y tampoco se les preguntó si pueden hacerlo.
De no ser así, las madres los dejarían al cuidado de la comadre, vecino, conocido o algún familiar, que no es el mismo cuidado que les darían los papás, además de significar un riesgo latente al quedar en manos ajenas y ser víctima de violencia en cualquiera de sus modalidades.
La calidad de las estancias infantiles es similar a la de una escuela particular, y es supervisada de manera espontánea por Sedesol y DIF.
La ventaja es que con este nuevo programa se evitará la triangulación de los recursos y se promoverá la transparencia en el manejo de los mismos, al ser entregados de manera directa a los papás o mamás.
Se ha sabido que en algunas estancias infantiles cobraban la beca de niños que no llegaban o que seguían cobrando de los que dejaban de asistir.
Lo cierto es que es algo parecido al programa Prospera con la entrega de recursos directamente a los padres o madres, ya que en muchos casos los papás o mamás cobraban el recurso sin que los niños asistieran a la escuela o a revisión médica.
Sin embargo, más parece una improvisación del Gobierno Federal, pues debió de analizarse los casos específicos de corrupción y mantener vigente el beneficio a miles de familias mexicanas.
En Chiapas existen cerca de 400 estancias infantiles de Sedesol o Bienestar, en Tuxtla Gutiérrez alrededor de 100, mientras que a nivel nacional son más de 9 mil 560 en beneficio de 329 mil 482 menores de edad.
Este programa surgió en 2007 con el gobierno de Felipe Calderón Hinojosa y con el tiempo fue reconocido por la Organización de los Naciones Unidas, por el apoyo en el desarrollo educativo de los niños de las familias mexicanas.