Desde tiempos inmemoriales se sabe que la CFE introduce energía eléctrica sin importarle si los asentamientos son predios invadidos. Sólo espera que la demanda del servicio sea mayor a cierto número de personas para sembrar los postes y meter las líneas.

CFE facilita contratos con uno o varios medidores cuyas boletas la pagan los invasores de manera proporcional entre los habitantes, por lo que es común ver las tendidas de cables que llegan a los hogares.

Así sucedió en lo que hoy es la colonia Emiliano Zapata (MOCRI), en la zona de Caleras Maciel que ahora es Chiapas Solidario, por mencionar algunas, sin que exista preceptos que prohíben a la CFE no introducir energía eléctrica en predios invadidos.

Sin embargo, continúa con la introducción de más postes y líneas en colonias de terrenos y casas invadidas por el MOCRI o que están en conflicto por invasión, como el caso de la colonia Loma Larga-Las Brisas.

De cierto modo, esta facilidad de la CFE contribuye a que las personas se empecinan más con el predio invadido.

Ayuntamientos, Gobierno Estatal, Federal, incluso los legisladores, deben analizar el tema de la regularización y la tramitología para brindar los servicios básicos en los asentamientos, de lo contrario las invasiones continuarán con mayor fuerza en la capital.

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